La marca Canal+ obra del
diseñador francés Etienne Robial se basa en los postulados de la
escuela suiza que abogaba por un estilo anónimo y supranacional. La unidad
visual del diseño se obtendría mediante la eliminación de todo elemento
decorativo en la composición y la organización asimétrica de los elementos del
diseño sobre una rejilla construida en modo matemático. Como en el pensamiento
Zen, el espacio vacio es el que crea la forma. Lo original aquí ha sido
implementar unos principios tan cartesianos y ordenados a un medio tan caótico
como el televisivo. Todos los elementos de la marca se articulan mediante un
sencillo juego estructural que parte de la rejilla coorporativa, en la que
tienen encaje la propia marca y una serie de elementos complementarios, como son
la series de polígonos rectangulares en contínuo movimiento que representan los
píxeles televisivos, que son los puntos básicos de los que se compone la señal
video y que se encajan aleatoriamente en la rejilla a semejanza de un Lego. Todo
ello junto una paleta restringida de colores y la tipografía Futura Bold,
obra del diseñador alemán Paul Renner, rediseñada por Robial,
conforman la marca Canal+.
La identidad se complementa, con una serie de elementos, algunos tan emblemáticos, como la autopromoción. La ambientación musical como complemento inexcusable de la imagen. El equilibrio en la composición del diseño de los decorados. La realización de efectos especiales reservados al cine. La comunicación impresa que complementa a la pantalla y un humor sutil y con un punto de ironía, conforman un intangible, una imagen única.
La aspiración a la unidad formal hacen que cada pieza gráfica sean un exponente de la imagen de la marca. Como en el contrapunto musical en el que las distintas melodias de los instrumentos se unifican gracias a la armonía, la marca hace aquí de elemento aglutinante, de todas las variantes del estilo.
El espíritu de
la imagen de marca ha impregnado a su vez los canales temáticos de Canal+ Cine y
Canal+ Deporte mediante una interpretación abierta de los elementos de identidad
de la marca, para adaptarla a los espectadores especializados en estos géneros.
Canal+ es la única televisión en Europa y seguramente en el mundo que produce animación en 3D de calidad cinematográfica. El éxito popular de Shrek 2 y Buscando a Nemo como las dos peliculas más taquilleras del año en EE.UU en 2004 demuestran el acierto a la hora de buscar una propia lectura plus de esta técnica que está arrasando especialmente entre los más jóvenes.
La producción de
animación plana en 2D es otra de las peculiaridades de la imagen que ejecutada,
bien con técnicas tradicionales o mediante ordenadores, dan vida de forma
sorprendente a todo tipo de personajes recreando pequeñas historias, llegando a
producir en ocasiones auténticos cuadros en movimiento.
La utilización estratégica del diseño junto con la renovación de los esquemas tradicionales de realización han formado un binomio eficaz para la revalorización de productos audiovisuales tradicionales como el fútbol o los toros. En este último caso combinando los elementos tradicionales de la fiesta con un tratamiento estético y técnico de vanguardia.
Uno de los
formatos más populares de Canal+ es el de las cortinillas o molinetes de
continuidad, utilizadas en origen para ralentizar la rapidez de la continuidad
del canal, se han convertido en un clásico de la antena. Se trata de una serie de campañas cambiantes, que realizadas con las más variadas técnicas y
estéticas, conforman en el tiempo una auténtica galería audiovisual. Desde el
humor a la concienciación social frente a problemas actuales como la
inmigración, todo tipo de discursos, conviven en este formato.
El mantenimiento de la esencia y la evolución, han sido siempre las bases de la imagen de Canal+ y uno de los valores estratégicos para la penetración y competitividad de la marca, adaptándose así a los vertiginosos cambios sociales y en gustos de nuestra sociedad. La apuesta iniciada en 1990 ha demostrado que se puede hacer una televisión de calidad cercana a las inquietudes y gustos populares.
Canal+ ha invertido en gráfica televisiva abriendo nuevos cauces por los que otros han discurrido, mejorando así la calidad de nuestras pantallas. Estas piezas son ya parte de la memoria sentimental de nuestros espectadores y muchos de ellos han enriquecido su cultura visual contemplando estas imágenes.
La trayectoria del diseño de Canal+ ha sido recompensada durante todos estos años con los mas prestigiosos premios nacionales e internacionales como los LAUS, los de la Asociación Española de Profesionales del Diseño, los PROMAX, los BDA, el Festival de Nueva York y finalmente el Premio Nacional del Diseño.
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La identidad de una televisión es el ADN de la televisión. La imagen de Canal+ tiene una personalidad muy fuerte. La marca Canal+ es mucho más que una marca. Marcar es existir. Los símbolos que tienen un mayor poder de captación y hasta de fascinación, son los que tienen la forma de cruz.
El haber creado esta sucesión de cortinillas, la idea de inyectar juventud a esa marca constantemente, a la marca de Canal+, y reforzar ese estilo, creo que ha sido un acierto, porque es algo añadido, algo por lo cual tu no pagas y te lo obsequian. Lo mejor que puede hacer cualquier proyecto de comunicación es que gratifique a quien lo emite y a quien lo recibe. El peor enemigo de las marcas es el tiempo. |